La salida fue a las 7.35, puntuales como siempre. Hacía un poco de fresco pero pronto entramos en calor. Llegamos a la subida de la pólvora, ya con el sol bastante alto y apretando, el calor se notaba más en nuestro cuerpo, pero se supero. Bajada por la senda del mix, siempre muy bonita, y corriendo a buscar el bar de Alfarp donde recuperamos fuerzas y vista.
De vuelta a casa, como era de esperar, nuestro querido Vicente nos volvía apretar y como hace tanta fuerza apretando el culo, se cargo el soporte del sillín de su maquina, pero pronto se pudo reparar y seguir la marcha.
Ernesto Tortosa
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