Después de pasar el verano cada uno por su lado, siempre entrenando algunos a escondidas, se decidió ir a cullera, para despedir el verano subiendo al castillo y viendo la panorámica impresionante desde la bola. Nos acompaño un benjamín, que siguiendo los pasos de su padre, intenta ingresar en el grupo, siempre intentando no dejarlo en ridículo.
Nos vemos pedaleando E.T.
Nos vemos pedaleando E.T.
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